En esta oportunidad, venimos a presenciar el resultado de una serie de ejercicios dados por el silencio y la soledad. Las analectas que se han presentado en este encuentro han tenido como cualidad testimoniar lo que nuestros jóvenes leen, además de exponer una capacidad para formar juicios, narrar y en definitiva, más allá de la correspondiente búsqueda, dejar en una escritura fresca los motivos, los intereses, los deseos traducibles en una cultura literaria cada día más dispersa y desencantada.