Esos trazos bien pueden ser una síntesis, un tanto a priori, de movimientos en la andadura, haceidad en esta maestría en que devienen obras de creación, cuerpo escritural al ensamblar microtextos de creación de sentido, expresión poética, antes que de figuras del lenguaje. Frente a las semánticas de humanidad de este mundo-texto, en que deviene la racionalidad en temporalidad, está la opción de la creática, movimiento emergente que se renueva en la mirada. Mirar la pedagogía como territorialidad, a la manera de Derrida, desde otras gramáticas de lo social.