Este libro propone una consideración por los aspectos humanos a la hora de analizar y comprender el espacio público, desde aspectos sociales, psicológicos, estéticos y arquitectónicos. Es una apuesta por alimentar la reflexión de las nuevas arquitecturas, a través de la identificación de estéticas de ciudad que permitan observar los procesos cotidianos afectivos como formas de construcción y creación espacial. Respondiendo a la necesidad de preguntar por una arquitectura que trascienda más allá de lo material y ayude a identificar con mayor claridad la tarea del arquitecto contemporáneo, quien no solo diseña edificios, sino que piensa en estrategias espaciales expandidas, sensaciones, rutas, marcas, narrativas y movimientos en las ciudades, desde los espacios públicos entendidos como escenarios vivientes y lienzos de la intimidad que se expone en un ejercicio poético para construir espacio colectivo en movimiento.