En este libro el profesor Eduardo Santos Ribón Badillo, nos sorprende y anima con un robusto cuerpo de reflexiones servidas muy especialmente para todos los que asumimos seriamente la responsabilidad en la educación de los jóvenes, a modo de píldoras elocuentes y significativas surgidas seguramente en su diario interactuar con los alumnos en el aula y fuera de ella. En efecto, nos encontramos aquí ante una coloquial sucesión de íntimas reflexiones portadoras, cada una, de importantes lecciones de vida con olor a pizarra, pupitres, corredores y acabadas experiencias que ponen al lector en franco diálogo consigo mismo.